Podemos ayudar a que tanto adolescentes como adultos se recuperen de sus condiciones emocionales, psiquiátricas o adictivas, brindándoles la confianza que necesitan para tener un futuro con esperanza.
Nuestro Tratamiento de Agresión
En términos generales, cuando una persona utiliza el término “agresión”, se refiere a varios comportamientos que pueden causar daños físicos o psicológicos a un individuo y a las personas a su alrededor, además de ocasionar daños a los objetos dentro del entorno. Aunque muchas personas sólo consideran a la agresión como un acto físico, la agresión puede incluir muchos tipos de comportamientos distintos, incluyendo ataques verbales destinados a causar daños psicológicos. En muchos casos, la ira y la agresión van de la mano. Sin embargo, cuando la ira de una persona está fuera de control, se convierte en algo destructivo y puede causar que la persona responda de una manera agresiva. Si estos impulsos agresivos no se controlan adecuadamente, pueden permitir el desarrollo de una serie de consecuencias negativas que afectarán la vida de la persona a largo plazo.
Existen diversos recursos de tratamiento disponibles para las personas que presentan comportamientos agresivos, mismos que les enseñan a controlar los impulsos de agresividad. Con el tratamiento adecuado, las personas pueden recibir la ayuda que necesitan para lidiar adecuadamente con su ira y agresión, esto con el fin de permitirles que tengan una vida más feliz y exitosa.
Causas del Comportamiento Agresivo
Las causas del comportamiento agresivo varían considerablemente. Sin embargo, es importante reconocer y comprender estas causas para efectos del tratamiento. Algunas de las posibles causas que pudieran hacer que alguien se vuelva más agresivo incluyen la genética, los trastornos fisiológicos, los padecimientos médicos, las influencias ambientales y ciertos medicamentos. Considere las siguientes explicaciones:
Factores genéticos: Se han realizado un sinnúmero de investigaciones para determinar si la agresión tiene un origen genético. La conclusión de estas investigaciones ha llevado al descubrimiento de un gen que pudiera causar los comportamientos agresivos o la oposición verbal en aquellas personas que lo tienen. Es debido a esta conclusión que muchos expertos consideran que la agresión puede ser genética.
Trastornos psicológicos: Los trastornos de salud mental son una de las principales causas del comportamiento agresivo. Aunque cualquier enfermedad mental tiene el potencial de conllevar a la agresión, las causas subyacentes más comunes son el trastorno bipolar, la esquizofrenia, el trastorno de déficit de atención/hiperactividad, el trastorno limítrofe de la personalidad y el trastorno de estrés postraumático. Otros padecimientos de salud mental que incluyen a la agresión como un síntoma incluyen:
- Psicosis
- Trastorno de oposición desafiante
- Enfermedad de Alzheimer
- Demencia
- Trastornos de uso de sustancias nocivas
- Trastornos de la conducta
- Trastornos del desarrollo
Padecimientos médicos: Además de los trastornos de salud mental, las personas que tienen ciertos padecimientos médicos también pueden presentar periodos de agresión. Por ejemplo, no es raro que las personas con epilepsia o discapacidades intelectuales experimenten brotes de agresión. Adicionalmente, las lesiones del cerebro también pueden provocar episodios de agresión.
Medicamentos: Muchas veces la agresión puede ser un efecto secundario de ciertos medicamentos, mismos que causan que una persona que normalmente tiene un buen comportamiento actúe de manera inadecuada. En caso de que la agresión sea el resultado de la reacción secundaria de un medicamento, el problema generalmente puede arreglarse ajustando la dosis o cambiando de medicamento.
Factores ambientales: El entorno también puede jugar un papel importante en el desarrollo de las conductas agresivas. Por ejemplo, es más probable que las personas que crecen constantemente expuestas a la violencia en el hogar y a los conflictos familiares exhiban comportamientos agresivos, ya que han aprendido este tipo de conductas de las personas que cuidan de ellas. Además, el ser victimizado por otra persona puede causar que un individuo actúe de manera agresiva.
Efectos del Comportamiento Agresivo
Cuando una persona continuamente tiene comportamientos agresivos, esto causará problemas significativos en su vida. Además, de no recibir un tratamiento para atender este comportamiento destructivo y hostil, la situación empeorará y las consecuencias pudieran afectar a la persona durante el resto de su vida. Los siguientes son algunos de los efectos que pudieran ocurrir si una persona sigue demostrando comportamientos claramente agresivos:
- Incapacidad para obtener o conservar un empleo
- Acciones disciplinarias en las escuela
- Fracaso académico
- Falta de armonía extrema entre amigos y seres queridos
- Deterioro en general de la salud mental
- Incapacidad para ajustarse a los cambios de una manera saludable
- Problemas financieros
- Desarrollo de un problema con las drogas y/o el alcohol
- Lesiones físicas múltiples
- Mayor necesidad de ser hospitalizado
- Múltiples problemas con el sistema legal
- Encarcelamiento
- Desarrollo de uno o más padecimientos de salud mental
Tratamiento para el Comportamiento Agresivo
Cuando se trata del tratamiento para el comportamiento agresivo, el enfoque general es controlar dicho comportamiento. Sin embargo, el proceso de tratamiento en sí es distinto dependiendo de las causas de la agresión. El proceso de tratamiento de una persona con comportamientos de agresión comienza realizando una valoración integral con un profesionista de salud mental. Esta valoración ayudará a los profesionistas médicos y de salud mental a identificar la gravedad de la agresión y las causas de esta conducta. Posteriormente se desarrolla un plan de tratamiento en base a las necesidades individuales para asegurar que el paciente reciba la atención más eficaz posible.
Hay diversos tratamientos eficaces que pueden reducir la presencia de los comportamientos agresivos y ayudar a las personas a vivir una vida más saludable, feliz y exitosa. El tratamiento para pacientes internos ofrece a la persona un entorno seguro y le permite apartarse de las situaciones estresantes de la vida diaria, mismas que pudieran provocar los comportamientos agresivos, de manera que pueda enfocarse exclusivamente en su recuperación. Además, este tipo de tratamiento brinda al paciente un acceso a distintos profesionistas de salud mental las 24 horas del día para recibir un apoyo continuo con cualquier inquietud específica que pudiera surgir respecto a su tratamiento. Este apoyo continuo permite evaluar con regularidad las necesidades de tratamiento del paciente y realizar los cambios necesarios a su plan de tratamiento a fin de garantizar el éxito. Adicionalmente, los programas de tratamiento para pacientes internos ofrecen diversas opciones de tratamiento terapéutico, mismas que atienden las necesidades de prescripción de medicamentos y enseñan aptitudes para enfrentar los problemas y controlar las emociones y el comportamiento. Todos estos servicios en conjunto pueden ayudar a la persona a evitar las conductas agresivas y aprender a vivir de una manera más adecuada.